31/03/2020

Lope Ochoa de Oro Iturralde


Capitán de infantería en el Tercio de Idiáquez que sobresalió en la batalla de Nordlinghen, en 1635, en la Guerra de los Treinta Años

Lope Ochoa de Oro Iturralde tercios infantería flandes
LOPE OCHOA ORO DE ITURRALDE

Lope Ochoa de Oro Iturralde es natural de la guipuzcoana villa de Mondragó- Arrasate, donde nació en 1615. Cursó estudios en la Universidad de Alcalá de Henares, graduándose en artes, y en la de Oñate en teología, en 1639. En esta misma villa fue elegido colegial de la Universidad Sancti Spíritus, consiguiendo cátedra de prima y vísperas de teología, de artes y de filosofía natural.

Su vida siempre estuvo vinculada a Ejército del Imperio español, militando durante cuarenta y ocho años. Comenzó en la Real Armada española, y llegó a capitanear la nao Soledad

Posteriormente, pasó a combatir enrolado en los Reales Tercios de Infantería, en el marco de la Guerra de los Treinta Años, entre España y los aliados Inglaterra y Países Bajos. Así, estuvo en los estados Italia, Lombardía y Flandes, a donde condujo desde Gibraltar tres mil infantes, tomando parte de sucesivas batallas.

Consiguió la gloria militar en la batalla de Nordlinghen, en 1635, donde le encomendaron la defen­sa de una posición estratégica, cima de una colina. Estaba integrado en el Tercio de Idiáquez, como capitán. En los quince asaltos que efectuaron, los protestantes fracasaron, pereciendo muchos efectivos católicos. Durante la defensa, una bala de cañón alcanzo el brazo derecho de Lope Ochoa. Pero, pudo mantenerse en lucha contra los protestantes, dirigiendo a sus soldados hasta la victoria final.
"Allí peleó como esforzado capitan Lope Ochoa de Oro Iturralde; cuando más empeñada estaba la contienda una bala de cañon le llevó el brazo derecho, pero él con valor heróico y abnegacion sublime, pidió una pica, y blandiéndola bizarramente en la mano izquierda, alentó á los suyos, y mantuvo su puesto, no cesando de luchar hasta que la indecisa victoria laureó, al fin, á los ejércitos católicos, y pudo ver tendidos en tierra diez y seis mil infantes y seis mil ginetes enemigos, tomadas noventa piezas de artillería y doscientas banderas, y prendidos gran número de capitanes, entre ellos Gustavo Horne, que estaba confuso y hecho mármol."

Según un testigo presente: "El valeroso tercio de Idiáquez, tan probado en Flandes, mostró con experiencia el coraje invencible de España."

El general del ejército de los aliados católicos, el Infante Cardenal, pudo comprobar este hecho y recompensar a Lope Ochoa con tres escudos de sobresueldo al mes y la pensión de doscientos ducados. Además, emitió una misiva a su hermano el rey de España, Felipe IV de Habsburgo, para recomendarle en un cargo acorde a su mérito demostrado. La carta expresaba la siguiente frase:
"Yo lo suplico á V. M. muy encarecidamente, pues en sus servicios caerá muy bien esta merced y yo la estimaré en mucho, por el valor y particular demostración con que se señaló ante mis ojos."

En enero de 16356, el mondragonés recibió la orden para regresar a España al ser nombrado veedor general de las Reales Fábricas de Armas de Guipúzcoa y Vizcaya, con una renta de doscientos ducados.

REAL TERCIO DE IDIÁQUEZ EN CIUDAD FLAMENCA

En agosto de 1641, fue nombrado capitán de Infantería, cargo que desempeñó hasta su muerte.

En julio de 1642, una real cédula le asignaba una pensión de doscientos ducados al año en merced de los resultados que estaba consiguiendo a las fábricas de armas.

Según la Real Cédula expedida el 28 de julio de 1642, se disponía a entregarle esa merced "teniendo consideración a sus servicios, sin que sea esto de conse­cuencia para otro, pues habrá pocos de este exemplo".

Estuvo casado con Jerónima de Bértiz, de cuyo hijo fue el capitán Francisco de Oro Iturralde, quien siguió la carrera militar tomando parte en la revuelta de Cataluña, muriendo en el sitio de Barcelona. Después, casó en Mondragón con Ana de Córdoba, teniendo por hijo a Lope Nicolás de Oro Iturralde, religioso franciscano, que profesó en la Universidad de Salamanca en 1657.

Como ocurría en otros muchos casos, militares y gobernantes desplazados en guerras y administraciones del Imperio de la Monarquía hispánica dedicaban los últimos años de su vida, ya retirados de servicio, al gobierno de sus villas natales. Este fue el caso de Lope Ochoa al ejercer el cargo de alcalde de Mondragón.

Este tipo de caballeros fue elogiado por Zorrila en la figura de Pedro Ruiz de Alarcón, y que bien muestra un paralelismo a la persona de Lope Ochoa. Le dedicó estos versos:
Muchos años por su patria
el buen viejo peleó.
Cercenado tiene un brazo,
mas entero el corazón.

Murió en 1646, en su casa sola­riega de Mondragón y enterrado en la capilla de San Pedro de la iglesia parroquial de San Juan Bautista de Mondragón. En este templo solían enterrar a sus antepasados desde que el primer Lope Ochoa y su mujer Catalina de Arcaraso Guesalibar fundasen el linaje.

26/03/2020

Encartaciones medievales de Vizcaya y Juntas de Avellaneda


La distribución del vecindario del territorio denominado Las Encartaciones se dividía en nueve valles o grupos de población del Señorío de Vizcaya, que se mantuvieron desde la Edad Media hasta el siglo XX: Somorrostro, Carranza, Gordejuela, Trucios, Arcentales, Güeñes, Zalla, Galdames, Sopuerta, además, las villas de Valmaseda y Lanestosa. Confinan por el norte con el Cantábrico, al sur con el Valle de Ayala y Oquendo, al oeste con Castro Urdiales y los valles de Villaverde, Mena y Soba y al este con la Ría de Bilbao y Baracaldo, que pertenece a la Tierra Llana del Señorío.

En Avellaneda se encuentran las Juntas de las Encartaciones, el archivo, la cárcel general y la residencia más común del teniente general del Corregimiento en la tierra encartada.

casa juntas avellanedas encartaciones bizkaia vascos
CASA DE JUNTAS DE LAS ENCARTACIONES EN AVELLANEDA

Encartaciones y Durangueses son dos distritos unidos a Vizcaya por incorporación. Iñigo López Ezquerra ganó las Encartaciones trocando otras tierras que ganó con el rey de León por ellas, aforándolas con el Señorío de Vizcaya y fue el primero que se llamó señor de Vizcaya. La jurisdicción de los diversos señoríos que componían esta tierra fue pasando a manos de los de Haro, señores de Vizcaya, que la poseían ya en su casi totalidad, en el siglo XIII.

El fuero de uso y costumbre y el de albedrío es el que disfrutaron estos concejos y valles de las Encartaciones; y es al final del siglo XIV cuando los redujeron a escritura (1394), a poco de haber jurado Enrique III de Castilla los fueros vizcaínos bajo el árbol de Guernica y en los demás lugares de uso y costumbre, durante el Corregimiento del doctor Gonzalo Moro.

El mismo corregidor nombrado por el rey, desde que Vizcaya recayó en la Corona real, representaba a sus altezas, y su calidad, al par que de letrado, debía ser hidalgo y de linaje de caballeros. En Guernica tomaba posesión de su representación oficial y después pasaba a Avellaneda para ser recibido en el territorio de las Encartaciones.

El primer corregidor fue el doctor Gonzalo Moro, que vino a Vizcaya en 1394. Estaba asistido por tres tenientes. Uno en Guernica para la Tierra Llana, otro en las Encartaciones y el tercero en el Duranguesado, y ninguno de estos podía funcionar fuera de sus distritos.

El teniente general del Corregidor con caballeros síndicos de los valles y concejos encartados, síndico general y oficiales elegidos entre los naturales y domiciliados en las Encartaciones formaban su cuerpo gubernativo. Y ni el Señorío de Vizcaya tenía voz ni voto en las Juntas de Avellaneda, ni la Encartación en las asambleas de Guernica. Los síndicos generales de la Encartación concurrían con voto a Guernica solamente cuando se trataba a cosas comunes a todo lo que era Vizcaya o al fuero promiscuo.

escudo encartaciones tallado piedra vizcaya
ESCUDO DE ARMAS DE LAS ENCARTACIONES

En las Juntas de la Encartación en Avellaneda se providenciaban sus pueblos y se nombraban los oficiales y caballeros que debían entender en su gobierno y administración.

El Señorío trató a menudo de que las Encartaciones no se portasen con tanto aislamiento y que así como las Villas y el Duranguesado tenían más contacto y unión, no lo pudo conseguir plenamente hasta finales del siglo XVIII.

22/03/2020

Leyenda del dragón de Arrasate-Mondragón


Durante la Edad Moderna, se forjó la leyenda del dragón de Arrasate. El cronista Esteban de Garibay dejó escrita esta tradición oral en su Compendio historial que describía la historia de la provincia de Guipúzcoa.

Por las estribaciones del monte Muru y la colina de Mandoin, bajaba una vez al año hasta el pueblo de Arrasate un enorme dragón llamado Herensuge. Era tan grande que con su cola dejó una huella que fue el camino que iba del mismo crucero de Arrasate a Olandiano.

El dragón tenía tan atemorizadas a las gentes, que llegaron a pagarle un tributo sangriento, también anual, para evitar sus depredaciones. Todos los años en la cuesta de Inchaurrondo, le presentaban por tributo una doncella soltera de la villa, que el monstruo se comía viva. Pero hartos ya los hombres de Arrasate y algo más despiertos de inteligencia con el tiempo, idearon un sustituto de doncella de carne y hueso por otra de cera. El monstruo no se dio cuenta del engaño y en el momento en que tenía las fauces obstruidas por la cera pegajosa, se presentaron bastantes ferrones arrastrando un larga y gruesa barra de hierro, al rojo vivo, se la metieron en la boca y le deshicieron las entrañas; así es como surgió el nombre del pueblo.

dragón leyenda mondragón arrasate gipuzkoa
ESCULTURA DEL DRAGÓN DE ARRASATE

Otra versión, la de Toti Martínez de Lezea, en sus Leyendas de Euskal Herria, explica que la mala suerte fue a recaer en la novia de un joven herrero. Este, en un acto de valor, fabricó en su herrería una lanza de hierro larga y afilada, y a acudió al monte para proteger a su novia y enfrentarse al dragón. Tras esquivar el fuego que el dragón expulsaba por su boca en el enfrentamiento, clavó la lanza en la garganta de la bestia dándole muerte.

Esta leyenda tiene alguna semejanza con otros cuentos populares como la de Andrómeda y Perseo y también con la de San Jorge, tan popular en la Edad Media. Pero la de Mondragón es la leyenda con variante curiosa, significativa, en la que el héroe es el pueblo en sí, y más concretamente, un sector productivo: el de los ferrones dedicados al hierro.

El blasón municipal encierra un dragón bajo un castillo con dos árboles verdes a los lados y sobre unas ondas, a lo que, según Garibay, añade una cadena. El castillo alude al que allí había, donde está hoy Santa Bárbara, y los dos árboles parecen que aluden a ambas entradas de la villa, viniendo de Arechavaleta y de Aramayona.

escudo municipal mondragón arrasate dragón blasón
BLASÓN MUNICIPAL DE MONDRAGÓN

18/03/2020

Palacio Laureaga y Casa Usondo en Vergara


El Palacio Laureaga, también llamada Etxeaundi, fue construido en el siglo XVI en la localidad guipuzcoana de Vergara por la familia Izaguirre junto al río Deba. Aunque fue construida en 1544 en estilo Renacentista de la época y planta cuadrada, sufrió una ampliación entre 1723 y 1725 por Esteban de Abaria en estilo Neoclásico, también reedificó su interior. A finales de ese siglo XVIII, Alejo Miranda construyó la escalera que une el jardín con el piso principal.

El resultado es un edificio de planta rectangular, siendo aspecto destacable la presencia de dos tondos con sendos retratos a ambos lados del acceso principal, relieves de carácter estereotipado pertenecientes al siglo XVI y que animan un frente ciertamente sobrio.

palacio laureaga casa etxeaundi vergara
FACHADA DEL PALACIO LAUREAGA

Sobresale su fachada principal, realizada enteramente en piedra sillar muy bien encuadrada. En ella destacan los dos medallones que flanquean el acceso, que acogen la representación idealizada de los fundadores del linaje; así como la reja del balcón de la planta baja con la inscripción "Ni la busques ni la temas", haciendo referencia a la muerte.

MEDALLONES Y BALCÓN DEL PALACIO LAUREAGA

El escudo, de buena hechura, es de comienzos del siglo XVII y las puertas de las ventanas del primer piso exhiben balcones de hierro y cierres o carpinterías de madera de primorosa factura del siglo XVIII.

ESCUDO DE ARMAS DEL PALACIO LAUREAGA

LATERAL DEL PALACIO LAUREAGA Y PUENTE DE ZUBIETA

El conjunto se completa con el puente de Zubieta sobre el río Deba y la vecina Casa Usondo. Es un palacio tardomedieval fechado a fines del XV, también llamado Etxetxiki. Posee planta rectangular y dos alturas, que mantiene lógicamente estrecho parentesco con las casas fuertes medievales, si bien introduce como novedad una acusada tendencia a la horizontalidad.

casa usondo puente zubieta vergara
CASA USONDO Y PUENTE DE ZUBIETA

13/03/2020

Pedro de Ursúa como modelo de vida, por la Universidad de Navarra




Modelos de vida: Pedro de UrsúaProyecto Modelos de vida y cultura en la Navarra de la modernidad temprana, por la Universidad de Navarra y la Fundación Caja Navarra.


10/03/2020

La carrera cultural por el V Centenario de la hazaña de Magallanes y Elcano


exposición magallanes elcano vuelta mundo museo naval
FUIMOS LOS PRIMEROS. MAGALLANES, ELCANO Y LA VUELTA AL MUNDO

Entrevista realizada por David Yagüe en el diario 20minutos el miércoles 27 de noviembre de 2019, a los historiadores José Calvo Poyato, Álber Vázquez e Ignasi Serrahima

El 20 de septiembre de 1519, cinco naves partieron de Sanlúcar de Barrameda. Formaban una misión de exploración comercial de la Corona de Castilla capitaneada por el portugués Fernando de Magallanes. Su objetivo era encontrar una ruta alternativa a las islas de las Especias que no dependiera de las aguas controladas por Portugal. Tres años después volvía a puerto una sola de aquellas naves, la Victoria, capitaneada por el marino vasco Juan Sebastián Elcano, con el objetivo cumplido, pero con un éxito histórico mayor: haber completado la primera circunnavegación a la Tierra.

Las industrias culturales y de ocio han entendido que el quinto centenario de aquella gesta debería resultar un buen filón. A falta de alguna celebración de Estado (de momentos ha habido más polémica), en España ya se están viendo exposiciones, conferencias, una película de animación y tres novelas sobre el asunto. Y se esperan más. El V Centenario de la Primera Vuelta al Mundo se celebra hasta el 22 de septiembre de 2022.

"La gran hazaña que llevó a cabo ese grupo de cerca de 250 hombres entre 1519 y 1522 al servicio de la Corona castellana es una proeza digna de ser relatada muchas veces y desde diferentes puntos de vista", asegura a 20minutos la historiadora María Saavedra, directora de la Cátedra Internacional de CEU Elcano. Primera Vuelta al Mundo. "Hasta ahora, Juan Sebastián Elcano era un personaje casi desconocido para el gran público", añade.

La industria editorial ha sabido apreciar el encanto y la ausencia de ficciones sobre Elcano. Entre septiembre y octubre se lanzaron en España tres novelas históricas:

1. La ruta infinita (Harper Collins Ibérica), de José Calvo Poyato

2. Poniente (Esfera de los Libros), de Álber Vázquez

3. El mapa del fin del mundo (Ediciones B), de Ignasi Serrahima

La ruta infinita relata el viaje y un periodo previo ambientado en Lisboa. "No podemos entender la expedición sin contexto: la rivalidad entre Castilla y Portugal", dice Castro.

Poniente tiene un tono aventurero. La ficción añade la "capa de la emoción" a la historia. Vázquez dice que podría haber escrito una serie "al estilo de los Episodios Nacionales de Galdós".

¿Por qué no se había tratado demasiado esta gran aventura? "Somos muy poco dados a realzar nuestros actos más brillantes y gloriosos: si aquel viaje hubiera acabado en un desastre absoluto, seguro que habríamos tenido novelas y películas", afirma Calvo. "Este es un país que tiene los brazos caídos, es apático, y eso nos afecta a todos, incluidos los novelistas", abunda Vázquez Serrahima, por su parte, añade otro factor: "La hegemonía cultural anglosajona actual, que menosprecia la historia que no le es propia".

¿Por qué se han fijado los tres en Elcano y menos en Magallanes? "Hay circunnavegación cuando Elcano toma esa decisión a la muerte de Magallanes. No debemos tener complejos en decirlo", afirma Calvo. Serrahima describe al marino vasco como "uno de los personajes más apasionantes de la historia, pero es también oscuro, desconcertante y contradictorio. Es fascinante en su misterio".

La aparición de estas novelas y de las películas que están en producción muestran algo que le gusta resaltar a Saavedra: "Las grandes históricas gustan, y si son verdaderas o tienen base de verdad, todavía más".

nao victoria juan sebastián elcano maqueta
MAQUETA DE NAO VICTORIA

06/03/2020

Francisco de Garay


Explorador y colonizador, fue uno de los primeros gobernadores de la isla de Jamaica y adelantado de una parte de los territorios de sur de los Estados Unidos de América

juan garay jamaica colonizador explorador
FRANCISCO DE GARAY

Francisco de Garay era natural de Sopuerta, Vizcaya. Llegó a La Española con Cristóbal Colón en su segundo viaje, en 1493, participando en la conquista de dicha isla. Fue nombrado, junto con Miguel Díaz, para elegir el lugar de la futura villa de Santo Domingo al sur de la isla. Fundó, junto a Bartolomé Colón, la ciudad de Santo Domingo (República Dominicana). Tuvo cargos de regidor, alguacil mayor, procurador de la isla, teniente de la fortaleza de Yaquino y repartidor de indios.

En 1515, Diego Colón le hizo gobernador de Jamaica en sustitución de Juan de Esquivel, con el encargo de organizar la explotación económica de la isla, evangelizar a la población indígena y hacer de ella base para futuras expediciones. Por eso, fue el primero en llevar ganado al Nuevo Mundo: vacas, ovejas y caballos. Ayudó a instalar la primera colonia europea en América con 40 familias vascas en Jamaica. Descubrió los primeros yacimientos del metal del oro en América, convirtiéndose en un rico hacendado en Jamaica, Santo Domingo y Puerto Rico.

En 1519, armó tres buques que fueron entregadas a los almirantes Alonso Álvarez de Pineda y Alonso de Zorita con rumbo a la Florida y con el propósito de reconocer los litorales del golfo de México. La expedición resultó un éxito ya que comprobó que la Florida es una península y desde allí recorrió toda la costa del golfo de México. S
e preparó el primer mapa que existe de esos litorales, desde la península de Florida hasta la de Yucatán.

EXPEDICIONARIOS EN AMÉRICA

Animado por el buen suceso de esa expedición, Garay envió otra en 1520, confiada a Diego Camargo para que penetrara en la región del Pánuco. Esta expedición terminó en un fracaso ya que Camargo fue atacado por los indios y obligado también a retirarse por algunos hombres de Hernán Cortés.

Un año más tarde Garay logró que se le concediera el título de adelantado y gobernador en una amplia zona que abarcaba el litoral mexicano desde Pensacola hasta Cabo Rojo.

Con el título de gobernador y adelantado, en junio de 1523, Garay partió de Jamaica, llevando consigo más de 800 expedicionarios españoles y buen número de indios jamaicanos, embarcados en cerca de una decena de barcos.

Desembarcó Garay en el que llamó río de las Palmas, que algunos han identificado con el Río Bravo, llegando al río Mississippilo. En la región de Pánuco tuvo numerosos problemas, que se agravaron cuando hombres de Pedro de Alvarado y Diego de Ocampo, por disposición de Hernán Cortés, lo detuvieron por no corresponder con su jurisdicción. A las capitulaciones de Garay, los representantes de Cortés opusieron una real cédula. 

Garay fue derrotado, perdió todas sus embarcaciones y su fortuna, y llevado prisionero a la ciudad de México. Aunque Cortés lo recibió con cierta cordialidad, el hecho es que poco después de haber llegado, precisamente en Nochebuena de 1523 enfermó y tres días después murió.

Algunos mapas europeos registraron el desafortunado intento de Garay nombrando a la región que quiso conquistar como Conquista Garayana, o Victoria de Garayana. En la actualidad lleva su antiguo nombre de Pánuco.

02/03/2020

Merindad de Durango: el Duranguesado medieval


El Duranguesado está constituido por la Merindad de Durango en su totalidad y las cuatro villas. Las once anteiglesias de la merindad eran Abadiano, Berriz, Mallavia, Mañaria, Yurreta, Garay, Zaldúa, Arrázola, Axpe, Apatamonasterio (valle de Achondo) e Izurza. Las villas eran Ermua, Elorrio, Ochandiano y Durango. En 1630, la anteiglesia de San Agustín de Echevarría fue agregada a la villa de Elorrio.

durango merindad duranguesado mapa villas anteiglesias medievo
MAPA DE LAS ANTIGUAS ANTEIGLESIAS Y VILLAS DE LA MERINDAD

Estas once anteiglesias componían en lo político-administrativo la entidad Merindad, de la que estaban separadas las cuatro villas, que tenían su fuero propio. Las villas y la merindad se relacionaban, para solventar sus problemas comunes, por medio de la denominada Junta de los Doce Pueblos. Es decir, el gobierno de la merindad de Durango reproducía el esquema gubernativo propio de Vizcaya: por un lado el teniente de corregidor, teniente de prestamero y merino, y por otro, la Junta de Merindad representativa de la comunidad.

Había dos tipos de Juntas, una ordinaria en Astolazubiaur de Abadiano, y otra extraordinaria, bajo el árbol de Guerediaga. La primera era de reunión frecuente; sustituyendo en el siglo XVI a la de Krutziaga y poseía sala de reuniones, auditorio para impartir justicia, cárcel y residencia para el teniente de Corregidor. La segunda solía celebrarse por Pascua de Resurrección, Espíritu Santo o Navidades en la campa de Guerediaga de Abadiano, al lado de la ermita juradera de San Salvador y San Clemente.

Competía a la Junta de Astola atender a las relaciones de la merindad con el Señorío, velar por el mantenimiento de la integridad de la zona merindad contra las pretensiones del villazgo, tesorería y todo lo referente al orden público. En las Juntas de Guerediaga las necesidades atendidas eran menos perentorias y más solemnes: creación de cargos, rendición de cuentas, juramento del Corregidor, etc. Respecto a los oficiales del señor, el corregidor nombraba al teniente de corregidor, que debía ser de allende el Ebro (los otros dos se nombraban en Avellaneda y Guernica), el prestamero mayor del Señorío designaba al teniente prestamero, y el teniente de merino era nombrado por el merino mayor, que patrimonialmente era el conde de Aramayona.

juntas duranguesado guerediaga abadiño ermita
ERMITA DE SAN SALVADOR 

La unión definitiva de esta merindad al Señorío de Vizcaya tuvo lugar el siglo XII. Aún así, la Merindad de Durango no dependía económicamente del Señorío ni acudía a las Juntas de Guernica hasta la escritura de 1628. Este año, se adjudicaron a la merindad dos votos que en 1740 fueron aumentados en tres más. Funcionaba esta merindad como las Encartaciones, la jurisdicción ordinaria en lo civil y en lo criminal correspondía al teniente corregidor. Las apelaciones podían ser hechas al corregidor o al juez mayor de Vizcaya. Y no fue hasta los años 1628 y 1630 cuando la merindad participó en el gobierno del Señorío mediante escritura pública, en la que se estipularon derechos y obligaciones.

A partir de siglo X, el Duranguesado aparecía como una comarca muy vinculada, al igual que Guipúzcoa, al Condado navarro de Álava, y sometida a los avatares que experimentan las tierras vascas a la muerte de Sancho el Mayor de Navarra. Tras la batalla de Atapuerca (1054), Fernando de Castilla arrebató a su hermano García parte de los bienes patrimoniales de la Corona navarra transmitidos por Sancho.

En 1076, Alfonso VI se apoderó de Vizcaya, Álava, Guipúzcoa, Bureba y la Rioja, que no volvieron en su totalidad, a la Corona navarra hasta 1134. Desde que el rey García Ramírez (dice Labayru) fue aclamado rey de Navarra en Pamplona, en octubre de 1134, las regiones del Duranguesado, Guipúzcoa y Álava tornaron a quedar bajo el señorío de este rey. En el siguiente año de 1135 el conde Ladrón fue señor de Álava, del Duranguesado y de Guipúzcoa, comisionado por García, su rey, como el caballero en quien más confianza tenía, para poner las cosas de estos tres estados en orden. Tal vez sea esta la razón de que cuatro años después figure la Casa de Vizcaya ayudando al rey navarro en lucha contra Ramiro de Aragón; se tratará, en este caso, de vizcaínos durangueses sólo, puesto que los otros (los gobernados por Lope Díaz de Haro), estaban coaligados con Castilla.

casa juntas guerediaga campa juradera vizcaya durango
CASA DE JUNTAS DE GUEREDIAGA Y CAMPA JURADERA

Los reyes de Castilla continuaron reivindicando, a pesar de la restauración de 1134, la posesión del Duranguesado, y en las frecuentes guerras que los enfrentaron a Navarra, pusieron en cuestión la dependencia navarra de los tenentes de Durango.

En 1176 en la que se firman treguas de siete años entre los combatientes. Tanto Alfonso VIII de Castilla como Sancho el Sabio decidieron someter sus diferencias a la autoridad del rey de Inglaterra y suegro de Alfonso, don Enrique, que dio largas a la cuestión. Dos años después, el castellano se comprometió a devolver el Duranguesado al navarro. Con este tratado se venía a poner fin a la contestación, por parte de Castilla, de la soberanía navarra en esta zona de Vizcaya.

Es entre 1179 y 1199, cuando Sancho de Navarra VI otorgó el Fuero de los labradores del Duranguesado. Dicha carta o fuero fue confirmada por algún Alfonso de Castilla ante sus condes Diego López e hijo, Lope Díaz. Fue encontrada por fray Miguel de Alonsotegui en el interior de un misal de San Agustín de Elorrio.

A mediados de 1199, Alfonso VIII de Castilla, desconociendo el tratado, invadió Álava y puso sitio a Vitoria. Durante el asedio de esta ciudad suele situarse la entrega voluntaria o conquista de Guipúzcoa, Álava y el Duranguesado a la Corona castellana, al alborear el 1200.

REPRESENTACIÓN DE UNA JUNTA GENERAL EN GUEREDIAGA

Doce años después se concluye la complicada incorporación de la Comarca duranguesa al Señorío de Vizcaya mediante una donación. El rey castellano Alfonso VIII, agradeciendo la ayuda aportada por Diego II López de Haro en la batalla de las Navas de Tolosa (1212), le donaba el Duranguesado a perpetuidad. El señor de Vizcaya lo incorporó al Señorío manteniendo, sin embargo, sus principales peculiaridades intactas, es decir, independiente en lo económico y dispensado de acudir a las Juntas Generales de Guernica, situación que conservó hasta 1628. Sólo debía acudir a las Juntas de Guernica cuando alguna de las cuestiones a tratar afectara directamente a la merindad.

E igualmente que los otros tres componentes de Vizcaya, los de la Merindad de Durango contribuían al costo económico de la defensa de los derechos comunes de todos ellos. Así lo recoge el libro de las actas de las Juntas Generales y Regimientos de la Tierra Llana:
"Digo yo, Juan Martinez de Mendia, bolsero deste Señorio de Bizcaya en lugar de Hurtuño de Mendia, mi padre, que recibi de bos, Pero Ochoa de Gallarça, escrivano de la Junta deste Señorio, çiento e beinte e dos reales e medio en nombre de la merindad de Durango, que pareçe que cupo a la dicha merindad de pagar por el repartimiento de los cien ducados que se hizo en este Señorio por la yda de don Tristan de Leguiçamon, que cupo a la dicha merindad del sesmo que ha de pagar, sacando el tercio de las Encartaciones, e quedo a dar cuenta de los dichos reales.
Fecho en Vilvao, a tres dias del mes de março de mill e quinientos e çinquenta e nuebe años.
Juan Martines de Mendia  (rubrica)"

Desde antiguo, el lugar de las Juntas Generales de la merindad de Durango era el lugar denominado Guerediaga y en Abadiano se tenían las audiencias del corregidor y sus tenientes. A comienzos del siglo XVI, y en contra de la costumbre, los corregidores eligieron los arrabales de Durango para tales juntas. Informada de ello la reina Juana manda el 1 de febrero de 1508, con carta fechada en Burgos, que las Juntas de la Merindad de Durango se continuasen celebrando en Guederiaga, en Traña o Muncharaz y que la audiencia de los corregidores o sus tenientes tuviesen lugar los martes de cada semana en Abadiano.

ROBLE Y CRUCERO EN LA CAMPA JURADERA
DE GUEREDIAGA