Capitán de mar, libertador de Orán en 1681
FRANCISCO DE ABARIA |
Francisco de Abaria nació en San Sebastián, en 1620. Fue el fundador de un mayorazgo ubicado en Villafranca de Ordizia y encabezado por la casa-palacio de Abaria. De su linaje nobiliario procedieron varones que dejaron huella muy honda en la villa.
En 1655, Francisco consiguió una patente de capitán de guerra y mar, y como consecuencia de sus servicios y de su mucho valor desempeñado, se le encomendó el mando de seis de los mejores navíos que tenía armados la Casa de Contratación de Indias en Sevilla para que condujeran municiones y pertrechos de guerra a la Armada de Italia.
En 1681, participó en el cerco de liberación de la plaza de Orán. Como recompensa por sus esfuerzos, le regaló Carlos II una estatua de alabastro de Nuestra Señora de la Mercedes, que era la denominación que ostentaba su nave Capitana. Esta estatua, colocada en una capilla de plata, ha permanecido a sus descendientes, entre ellos el caballero guipuzcoano Tirso de Olazabal. Desde el siglo XVIII es propiedad de la Casa de Olazábal-Arbelaiz. En la parte baja de la capilla de plata, se puede leer la siguiente inscripción:
Sostuvieron algunos estudiosos que había error en esta inscripción, ya que no podía ser Felipe III, sino Carlos II, quien regalara la notable escultura al héroe de Orán.
En 1682, ascendió al puesto de general de la Flota de Nueva España, aunque murió en 1688.
La Casa-Palacio de Abaria está situada en la esquina de la plaza Mayor de Villafranca de Ordicia. En ella se alojó el pretendiente al trono real de España Carlos cuando vino, el 6 de julio de 1875, a jurar los fueros de Guipúzcoa. Dicho acto se celebró, según los documentos de aquella época, al día siguiente con extraordinaria solemnidad.
Tiene por escudo de armas una banda cargada de cuatro paneles puesta en medio de dos lobos andantes con un roble de sinople, frutado de oro, bordura de plata con ocho aspas de sable.
El linaje de Abaria descendía del linaje de Alzaga y de ella dimanaron las de Villafranca de Oria y otros lugares de Guipúzcoa. Algunos caballeros de este apellido, descendientes de la casa de Alzaga, se hallaron al servicio de los Reyes Católicos en la Guerra de Granada.
Luis Francisco de Abaria Zabala, natural de Alzaga, que sirvió en las Compañías de la Infantería española, y tuvo un hijo llamado Francisco de Abaria y Morales, teniente general y padre de Francisco Antonio de Abaria, capitán de Caballería de una de las compañías de número españolas en Santiago de Chile.
Esteban José Abaria, natural de Villafranca de Oria, fue miembro de la Orden de Calatrava, del consejo real y decano en el supremo de Indias. En 1738, se le confirió la plaza de ministro de capa y espada del Consejo de Indias, y en 1753 se le nombró camarista del indicado consejo.
José Abaria, hermano del anterior, fue también miembro de la Orden de Calatrava, presidente de la Casa de Contratación de Indias, establecida en Cádiz en el siglo XVIII, y decano del Consejo y Cámara de las Indias.
En 1655, Francisco consiguió una patente de capitán de guerra y mar, y como consecuencia de sus servicios y de su mucho valor desempeñado, se le encomendó el mando de seis de los mejores navíos que tenía armados la Casa de Contratación de Indias en Sevilla para que condujeran municiones y pertrechos de guerra a la Armada de Italia.
En 1681, participó en el cerco de liberación de la plaza de Orán. Como recompensa por sus esfuerzos, le regaló Carlos II una estatua de alabastro de Nuestra Señora de la Mercedes, que era la denominación que ostentaba su nave Capitana. Esta estatua, colocada en una capilla de plata, ha permanecido a sus descendientes, entre ellos el caballero guipuzcoano Tirso de Olazabal. Desde el siglo XVIII es propiedad de la Casa de Olazábal-Arbelaiz. En la parte baja de la capilla de plata, se puede leer la siguiente inscripción:
Esta SSma. imagen la dió el Rey Felipe III al Excmo. Señor don Francisco de Abaria, general de su armada cuando le mandó socorrer a Orán, como lo logró con el acierto que debía prometerse de tan soberana protección en cuya memoria es cabeza de uno de los Mayorazgos de la casa de Abaria.
Sostuvieron algunos estudiosos que había error en esta inscripción, ya que no podía ser Felipe III, sino Carlos II, quien regalara la notable escultura al héroe de Orán.
En 1682, ascendió al puesto de general de la Flota de Nueva España, aunque murió en 1688.
CASA-PALACIO DE ABARIA |
La Casa-Palacio de Abaria está situada en la esquina de la plaza Mayor de Villafranca de Ordicia. En ella se alojó el pretendiente al trono real de España Carlos cuando vino, el 6 de julio de 1875, a jurar los fueros de Guipúzcoa. Dicho acto se celebró, según los documentos de aquella época, al día siguiente con extraordinaria solemnidad.
Tiene por escudo de armas una banda cargada de cuatro paneles puesta en medio de dos lobos andantes con un roble de sinople, frutado de oro, bordura de plata con ocho aspas de sable.
El linaje de Abaria descendía del linaje de Alzaga y de ella dimanaron las de Villafranca de Oria y otros lugares de Guipúzcoa. Algunos caballeros de este apellido, descendientes de la casa de Alzaga, se hallaron al servicio de los Reyes Católicos en la Guerra de Granada.
Luis Francisco de Abaria Zabala, natural de Alzaga, que sirvió en las Compañías de la Infantería española, y tuvo un hijo llamado Francisco de Abaria y Morales, teniente general y padre de Francisco Antonio de Abaria, capitán de Caballería de una de las compañías de número españolas en Santiago de Chile.
Esteban José Abaria, natural de Villafranca de Oria, fue miembro de la Orden de Calatrava, del consejo real y decano en el supremo de Indias. En 1738, se le confirió la plaza de ministro de capa y espada del Consejo de Indias, y en 1753 se le nombró camarista del indicado consejo.
José Abaria, hermano del anterior, fue también miembro de la Orden de Calatrava, presidente de la Casa de Contratación de Indias, establecida en Cádiz en el siglo XVIII, y decano del Consejo y Cámara de las Indias.
VIRGEN DE ABARIA Y ESCUDO DE ARMAS DE ABARIA |
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